El Mohán

Tiene el cuerpo cubierto con una larga caballera, manos largas, uñas largas y afiladas. Dicen los campesinos que el Mohán vive en los montes o a la orilla de los ríos. Le gusta devorar niños, les chupa la sangre y luego come su carne asada. Algunos lo consideran un duende familiar que se apodera de los tesoros. El mito parece ser universal porque en la literatura se refiere a él en muchas ocasiones sobre todo en espesos bosques, lugares sombríos e inaccesibles montañas.